Esto no es un espectáculo propiamente dicho, sino un happening, un suceso, un acontecimiento, una experiencia acústica ideal para ciegos, un acto de escucha y, por eso, también un producto vintage, rebelde, kamikaze si quieres, en los tiempos que corren, mucho más “videntes” que “oyentes”. Se trata de indagar, a través de un collage de fragmentos del Tenorio de José Zorrilla (que se ofrecen en formato de lectura dramatizada), en el interesante mito español de Don Juan, avatar romántico del soldado fanfarrón de las comedias de Plauto, del Capitano de la commedia dell’arte italiana, trasunto literario del ya tan rancio machirulo ibérico. Y también es una ceremonia funeraria, una liturgia necrológica, un homenaje a todos los que ya se nos fueron para siempre y siguen viviendo en nuestra memoria. Que las voces claras de este puñado de teatrejeros y los oídos atentos de ustedes fabriquen el milagro, un conjuro contra la muerte.